Índice de este artículo
Historia del chihuahua sin pelo
La historia del hairles chihuahua o chihuahueño sin pelo es realmente moderna, puesto que se empezó a trabajar con la misma hace escasos años. Surge gracias a un grupo de criadores de diferentes partes del mundo entusiasmados en crear un perro de bolsillo, pero carente de pelo; para conseguirlo, en una primera generación se cruza un ejemplar macho de chihuahua con pelo con otro carente de vello (por ejemplo un Viringo o un Xoloitzcuintles), en la descendencia existe la probabilidad de que algún ejemplar nazca sin vello; en una segunda etapa, se apareará ese cánido con otros chihuahuas y, tras varias generaciones, se consigue crear un can semejante al chihuahua pero con ausencia de pelo. Una vez fijada la raza acorde con el estándar del chihuahueño actual o normal, se empezarán a realizar apareamientos entre ejemplares sin pelo, para así obtener canes con mejor calidad en su fenotipo.
Por consiguiente, podemos afirmar que la historia del chihuahua sin pelo es el resultado de un trabajo muy meticuloso, en el que tras ciertos cruces buscados o seleccionados en varias generaciones, se consigue animales que más se aproximan al estándar del chihuahua ordinario, es decir el reconocido oficialmente por las principales asociaciones caninas; en definitiva, se trataría, más que de una nueva raza, de una variedad desnuda del anterior.
Estándar aún no aprobado
Su estándar oficial aún no es reconocido en asociaciones caninas, aunque se busca una morfología similar al chihuahua con pelo.
Caracteres que han de fijarse para conseguir un futuro campeón, su estándar:
El perro ha de presentar un estándar que más se aproxime al estándar del chihuahueño.
Cabeza amanzanada, redonda. Ojos también redondos, grandes y muy separados; nariz corta; orejas grandes, de inserción alta, erguidas.
Cuerpo un poco alargado, compacto. Cuello redondo, fuerte. Las extremidades cortas y los pies pequeños, buenos aplomos. Cola mediana, curvada hacia su espalda.
El cuerpo ha de estar totalmente desnudo, pero se debe admitir un poco de vello en la cabeza, extremidades inferiores y extremo final de su cola.
Ha de aceptarse todo tipo de colores en relación a su manto, tanto colores sólidos, como mezclados.
Su peso debe oscilar entre uno a tres kilos, descartándose para la cría los ejemplares que presenten peso mayor.
El carácter del perro ha de ser dulce, juguetón, activo y muy valiente.
Deja una respuesta