Reptiles fáciles de cuidar que puedes tener en tu casa cómodamente

Día a día vemos crecer a los fanáticos de herpetos que desean encontrar reptiles fáciles de cuidar, para tenerlos en sus casas sin necesidad de dedicarles demasiadas horas al día en cuanto a sus cuidados, y seleccionando ejemplares con menos riesgos de enfermar o morir prematuramente.

En primer lugar, es necesario saber los cuidados básicos para la clase de reptil de tu preferencia, ya que esto te ahorrará camino cuando optes por el tuyo. El agua es de vital importancia para ellos, por lo que siempre debe haber disponible agua fresca en su terrario. Hay que tratar de evitarles cualquier situación de estrés, tal como que niños curiosos se acerquen a manipularlos, ruidos molestos, mal ambiente…, ya que son situaciones que pueden bajar sus defensas y ser susceptibles a determinadas enfermedades.

Por último, es necesario tener presente determinados parámetros que requieren para su supervivencia, aspectos relacionados con la humedad, temperatura, iluminación, sustrato… En el mercado se pueden comprar accesorios para cubrir sus necesidades básicas, según especie, también terrarios o acuaterrarios aptos para recrear su ambiente natural.

Ejemplo de reptiles fáciles de cuidar

Seleccionamos algunas especies, aunque para no ser muy extendido, es de destacar que el número podría ser más amplio.

Tortugas

Las especies más fáciles de mantener en buenas condiciones son las semiacuáticas como la tortuga de Florida. Prepara un acuaterrario amplio para ella, mantén limpio su zona de agua y bríndale una alimentación variada. Cuando son aún crías, necesitan más proteínas, en general su dieta se basa en la carne. Para evitar un desbalance nutricional, es conveniente aderezar sus alimentos con un complejo vitamínico dos veces a la semana, también existen piensos o balanceados comerciales que son de su agrado, ensucian menos el agua, y están confeccionados a base de una dieta bastante equilibrada. Como puedes comprobar, este es uno de los reptiles fáciles de cuidar.

Geckos

También conocidos bajo el nombre de salamanquesas, estos lagartos que pueden convertirse en domésticos son muy cariñosos y el cautiverio no es un modo de vida estresante para ellos, ya que se reproducen con facilidad. Su alojamiento debe ser un terrario en el que se le incluya una cueva, ya que en su hábitat tiende a refugiarse en ellas.

Es necesario que, aunque se traten de reptiles fáciles de cuidar, vigilemos la temperatura y humedad de su terrario. Sin olvidarnos de la higiene, imprescindible para prevenir numerosas infecciones. Este tranquilo reptil se alimenta de presas vivas, por lo que podemos suministrarle grillos, saltamontes, cucarachas y gusanos de la harina.

Serpiente del maíz

Otro de los reptiles fáciles de cuidar es esta colorida serpiente. Lo que debemos tener en cuenta es que facilidad no implica poco espacio, ya que este ejemplar puede alcanzar bastantes metros en la adultez y su terrario debe ser tan largo como ella. Necesita un terrario con 50% de humedad, una temperatura mínima de 20ºC durante la noche y un máximo de 25 ºC en el día. El sustrato del terrario debe ser ecológico y tiene que carecer de toda toxicidad, ya que está en contacto con sus alimentos y podría contaminarlos.

Hay que tener muy en cuenta que son famosas escapistas, por lo que la tapa del terrario tiene que ser más pesada de lo que ella pueda levantar. Se las puede alimentar de ratones congelados, los cuales deben ser dispuestos en un recipiente especial para comida, igualmente pueden comer roedores vivos, quizás para muchas personas es un tanto desagradable, aunque forma parte de su naturaleza. Por mucho que sea uno de los reptiles fáciles de cuidar, nunca la alimentes directamente de tu mano, ya que tenderá a asociarla con comida y puede agredirte en la confusión.

Camaleones

Los camaleones son más delicados que las especies vistas con anterioridad, pero el camaleón del Yemen se adapta bien a la vida en un terrario. Prefieren instalaciones de maya que estén ventiladas y con vegetación, ya que tienen hábitos arborícolas y gusta trepar. Además en estado salvaje habitan en climas tropicales (temperaturas no inferior a 25º C), por lo que precisan de una correcta temperatura y humedad, la iluminación también es muy relevante para mantenerlos en cautividad como se merecen.

No olvides que beben gotas del rocío, aunque si pulverizamos el habitáculo, manualmente o con los sofisticados accesorios existentes en el mercado, encontrará agua para colmar sus necesidades hídricas. La alimentación debe ser a base de pequeños insectos vivos.

Existen otras especies de reptiles fáciles de cuidar como las iguanas, que con un poco de maña también se pueden adaptar al entorno doméstico.