Índice de este artículo
El más pequeño de los lebreles, el lebrel italiano, es también conocido bajo el nombre de galgo italiano o piccolo y sus orígenes se remontan a más de cinco mil años atrás. Las cortes de faraones del Antiguo Egipto fue la cuna para el perro que vio reducirse su tamaño a través de los siglos y que llegara a su expresión más pequeña en el 1800.
Debido a su tamaño y carácter, el galgo italiano fue siempre concebido como un perfecto perro de compañía.
Aspecto físico del galgo italiano
El galgo italiano dueño de un cuerpo grácil y esbelto debido a los delgados huesos que le dan forma, pero también compacto. Su cabeza y hocicos en forma alargada son la herencia de los galgos más corpulentos que le dieron origen. Sus pequeñas orejas forman un ángulo recto y su cola se va afinando hacia el extremo. El manto del lebrel italiano, que puede presentarse en color gris o azul, negro o amarillo, es corto, muy brillante, de una suavidad extrema y muy compacto. Son pocas las ocasiones en las que muda el pelo.
¿Por qué azul y de pequeño tamaño?
El pelaje azul del galgo italiano es un clásico, además muy cotizado y demandado por el público en general, especialmente por el hecho de que ofrece al perro un aspecto muy bello. Lo mismo ocurre con el tamaño, hay preferencia por parte de muchas personas a adquirir ejemplares que en edad adulta adquieran estaturas lo más pequeñas posibles. Por supuesto que el tamaño y el color azul se consigue a base de buena crianza por parte de criadores especializados en la cría del lebrel italiano.
Necesidades afectivas del lebrel italiano
Si los perros, cuando están transitando su fase de cachorros, llaman la atención de sus dueños rompiendo los elementos del hogar, las pertenencias de su amo y haciendo sus necesidades dentro de la casa, bien podríamos decir que el lebrel italiano es un eterno cachorro.
Esta raza tiene muy altas necesidades afectivas, ante lo cual sigue a su amo a sol y sombra durante todo el día y por toda la casa, pero no conforme con ello, si es que el galgo italiano no logra el cariño y el afecto que busca, se tornará irascible y pronto se desquitará desgarrando las prendas favoritas de quien le abriera las puertas de su hogar.
Resulta primordial tener en cuenta que el lebrel italiano es un perro que necesita de mucha atención y cuidados, ya que no está dispuesto a ser ignorado y dejado de lado.
Esta raza es la ideal para las personas que aman tener a sus canes en el sofá cómodamente dispuestos y que cuando llega la hora de irse a dormir, se sienten reconfortados al sentir a su mascota en contacto con su cuerpo debajo de las sábanas. En caso contrario, no será una buena idea adquirir un ejemplar de la raza galgo italiano.
Independientemente del afecto y la atención que reciban, el comportamiento de cachorro suele durar hasta los cuatro años de vida del animal, por lo que deberemos plantearnos qué tipo de mascota estamos buscando.
Integración del lebrel italiano al hogar. Carácter
Esta etapa suele ser mucho más prolongada con el lebrel italiano que con otras razas de perros, ya que le cuesta mucho adaptarse a las normas del hogar y a tener que comportarse de forma apropiada para cumplirlas. En algunos ejemplares la integración dura solo unos cuantos meses, pero en otros casos pueden pasar algunos años antes de tener que olvidarnos de encontrar alguna sorpresa desagradable al llegar a casa.
La raza galgo italiano cuenta con una manía bastante particular y es que no se muestra para nada afín a salir a la calle en condiciones climáticas de lluvia o fuertes vientos, por lo que terminará haciendo sus necesidades dentro del hogar.
Una solución muy útil para este problema es disponer para ellos una bandeja con arena o con el sanitario especialmente formulado para gatos.
Cuidados del lebrel italiano
Si hay algo a lo que podemos dejar de prestarle atención a nuestro galgo italiano, eso es a su pelo. Dado que son pocas las ocasiones en las que lo muda, no es necesario cepillarlo tan a menudo. Además, es un perro que no despide olor, por lo que resulta perfecto para interiores. Sin embargo, dentro de los cuidados que tenemos que tener está el de llevarlo a dar largos paseos, y más de una vez al día. Esta es una raza muy energética, por lo que necesita descargar toda esa vitalidad poniendo en marcha todo su aparato locomotor.
Por otra parte, el lebrel italiano es muy ágil y escurridizo, por lo que no es de extrañar que ande saltando a nuestros pies a medida que nos desplazamos por la casa. Por ello es muy importante estar atento para no llevárselo por delante.
A su vez, tienen una tendencia al escapismo, para lo cual tienen a favor la velocidad de 35 kilómetros por hora que pueden alcanzar. Por lo tanto, sería inútil salir corriendo tras ellos. Es así que una vez más queda comprobado el dicho que nos llama a prevenir antes que a curar: cerquemos y vallemos nuestra casa en todas las aberturas posibles.
Carácter del galgo italiano
Dado su aguda inteligencia, se suele pensar que son dóciles y obedientes; ¡grave error! El galgo italiano o lebrel italiano es un obstinado can que se sale con la suya la mayoría de las veces. Pero todo en la vida tiene su compensación y la que el galgo de Italia nos brinda es la de ser sumamente amante con nosotros, sus dueños. No obstante, hay que tener presente que, más allá de la firmeza, este perro necesita un amo con una enorme capacidad de amor y una cuota de paciencia de igual tamaño.
Precio del lebrel italiano
El precio de un cachorro lebrel italiano está acorde con su morfología y la utilidad para el que sea destinado, aquellos que se venden para concursar en exposiciones caninas y reproducción suelen ser precios más elevados y habrá que pactarlo con el criador, si no nos interesa detalles muy precisos en cuanto al aspecto físico del animal o su tamaño, podemos adquirirlo a un precio más asequible, aunque no es una de las razas más económicos y su precio en el mercado suele superar los 1000 euros con pedigree.
Deja una respuesta