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La rana pirenaica, Rana Pyrenaica, es un pequeño anuro del grupo Ranidae que se halla restringido geográficamente a la porción occidental y central de la cordillera de los Pirineos. Propia de un ecosistema frágil y sujeto a las variaciones climáticas, así como a factores de origen antrópico como la siembra de truchas y desarrollos turísticos. Por estos motivos es catalogada como especie amenazada, mientras que las autoridades conservacionistas en territorio español le dan el estatus de vulnerable.
Identificación de la rana pirenaica
La rana pirenaica básicamente mantiene una tonalidad pareja en todo el dorso, con variaciones entre un color crema y gris oliváceo. Es de color blanquecino en la zona ventral, con una tonalidad grisácea en torno a la garganta.
Son relativamente pequeñas, con tallas entre los 30 y 50 mm de largo, con extremidades proporcionalmente alargadas, así como el desarrollo completo de una membrana interdigital en sus extremidades posteriores. Poseen un tímpano bastante pequeño en comparación con otros anfibios, y sus pliegues intercostales son poco desarrollados. En época de reproducción, la Rana pyrenaica desarrolla callosidades en el primer dedo de cada mano, siendo esta de un color claro, amarillento. Este tubérculo lo usan para sujetarse de la hembra con firmeza.
Existe dimorfismo sexual en esta especie, siendo los machos de menor tamaño que las hembras. Estos ejemplares guardan similitud con la Rana temporaria, con la cual está estrechamente emparentada.
Dónde avistarlas
La Rana pyrenaica se encuentra restringida a una pequeña región dentro de la cordillera de los Pirineos, entre el centro de estas elevaciones y su extremo occidental. Cuenta con mayor presencia del lado español, desde Navarra en el valle del Irati, hasta Aragón, en el Parque Nacional Ordesa. Del lado francés se ubica una población menos numerosa en el departamento de Pyrénées Atlantiques. El rango altitudinal de estos ejemplares se ubica entre los 450 y los 2200 msnm.
Hábitat de la rana pirenaica
Es un espécimen principalmente acuático que habita en cauces hidrológicos típicos de montaña, con torrenteras de aguas cristalinas y alto nivel de oxigenación.
Los renacuajos permanecen en grupos en el bento, a la protección de las corrientes y el sustrato rocoso. En su etapa juvenil, los individuos se separan y colonizan otras áreas de los arroyos.
Se ha reportado la observación de ejemplares de rana pirenaica en abrevaderos de aguas corrientes, así como en fuentes con aguas en constante relevo, ambas locaciones asociadas al sistema montañoso de donde es típica la especie.
Alimentación de Rana pyrenaica
No se poseen datos sobre la alimentación de la rana pirenaica, ni se asocia con lo hábitos alimenticios de especies estrechamente emparentadas con ella.
Reproducción de Rana pyrenaica
Su biología reproductiva está asociada al deshielo, entre los meses de febrero y abril. Las hembras en esta fecha colocan puestas que oscilan entre los 50 y 170 huevos, los cuales depositan en el sustrato bajo las rocas o como en algunos casos, entre la vegetación sumergida, teniendo como norma que la puesta se haga en tramos donde las aguas del arroyo sean más someras que rápidas.
Los huevos suelen ser relativamente grandes en comparación a los de otras especímenes filogenéticamente relacionadas con la Rana pyrenaica. Estos tampoco flotan, por lo que se mantienen adheridos al fondo. Este proceso de reproducción se da en cauces hidrológicos de montaña. Se presume que estos espacios de reproducción son compartidos con el Calotriton asper, mas no así con su pariente cercano, la Rana temporaria.
Las poblaciones de estos ejemplares se ven en declive a causa de algunos factores externos, como es el caso de la siembra de truchas, espécimen ictiológico depredador que diezma a las poblaciones de renacuajos y juveniles.
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