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Los tunicados (Tunichata), también denominados urocordados (Urochordata), constituyen un subfilo que se integra dentro del filo de los cordados (Chordata). Constituyen más de 2.000 especies de vida exclusivamente marina. Un ejemplo característico lo tenemos en la ascidia.
Características de los urocordados
El grupo de urocordados comparte ciertas características que los incluyen como subfilo, la primera de ella es la presencia de cubierta denominada túnica, la cual está formada por celulosa y otras sustancias minerales. La segunda característica es la presencia de notocordio, que se extiende solo en la cola y se pierde transcurrida la fase larvaria, salvo en la clase apendicularias (Appendicularia).
En definitiva, los tunicados destacan por la ausencia de organización metamérica y también por presentar un aparato circulatorio abierto y lagunar. Con concentración de metales en sus organismos notablemente superior al de otros animales.
Los tunicados o urocordados viven prácticamente en todos los océanos y mares, asociándolos a aguas marinas y afines, como pueden ser las aguas salobres tipo marismas.
Los urocordados comprende tres clases, taliáceos y apendicularias, los cuales llevan una vida móvil, son pelágicos, viven entre el plancton marino, por lo que muchos llegan a ser bastante cosmopolitas al ser arrastrados entre las corrientes marinas, y las ascidias, más numerosas pero sésiles, permanecen fijas en el fondo, por lo que pueden considerarse más endémicas, en la medida que aunque son móviles durante la fase larvaria, este proceso suele durar poco tiempo.
En general, los urocordados pueden encontrarse en diversidad de profundidades algunos se han documentado hasta los 8.000 m de profundidad.
Se alimentan de materia orgánica, concretamente son descritos como suspensívoros filtradores. Son hermafroditas en su mayoría y de fecundación externa. Según clase la reproducción puede ser sexual y asexual, aunque en algunos casos como la clase Appendicularia solo sexual.
Desde el punto de vista farmacológico es de destacar que muchos urocordados, especialmente las ascidias, despiertan interés en el mercado farmacéutico, pues se fabrican medicamentos con poder antibacteriano, antivírico, etc. Igualmente parecen ser útiles como organismos indicadores de detección de contaminantes.
Organización de los tunicados
Los urocordados atraviesan por una fase larvaria móvil, gracias a la presencia de cola con notocordio que con posterioridad se pierde, salvo la clase Apendicularia (que durante toda su vida son larvas). Tras la atrofia de la cola, el organismo se fija en el sustrato formando el tunicado en su fase adulta, tiene forma de saco o bota y presentan sifón por el que entra y sale el agua, cumpliendo las funciones de alimentación y respiración. Salvo los ascideáseos que son sésiles, el resto de grupos son pelágicos.
Tipos de urocordados
Apendicularias (Appendicularia)
Las apendicularias, también denominados larváceos, son de tamaño pequeño, no más de 4 cm, lo normal es entre 2 a 3 mm, tienen forma de larvas, con envoltura mucilaginosa transparente, que puede regenerar si es atacada por un depredador o en caso de estar en mal estado. Gracias a su cola forman corrientes que les habilitan para mantenerse a flote, poder moverse, también para regular la respiración y facilitar la entrada de agua, de esa manera arrastran también alimentos para su ulterior ingesta. Son especies solitarias.
Taliáceos (Thaliacea)
Los taliáceos son organismos tunicados adaptados a la vida pelágicas en rangos de profundidad comprendidas entre la superficie hasta los 3000 metros. Tienen forma de bota o tonel, presentan boca y una cámara atrial, no disponen de cola en su fase adulta, por lo que la locomoción se realiza gracias a contracciones musculares que permiten expulsar el agua de la cavidad atrial, con poder de propulsión mediante liberación de agua gracias al sifón cloacal. Pueden vivir de forma individual o en colonias. Son considerados filtradores.
Ascidiáceos (Ascidiacea)
Es el grupo de las ascidias, consideradas bentónicas y con gran rango de distribución geográfica, también ocupan diversas profundidades. Presentan forma de saco y disponen de dos sifones, bucal o inhalante y cloacal o exhalante. Por el primero entra el agua con partículas nutritivas de las que se alimentan a través de la cámara faríngea por medio de filtración, con posterioridad el agua es expulsada mediante el sifón cloacal. Al igual que el caso anterior, estos tunicados pueden vivir individualmente o formando colonias. Son siempre sésiles e incrustantes en su fase adulta.
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