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En artículos anteriores ya hemos hablado de la acuariofilia. Para su iniciación es relevante tener presente ciertas consideraciones generales que ayudarán a organizar todo lo relacionado con el espacio acuático que vamos a instalar en el hogar familiar. Es obvio que el manejo de un acuario de agua dulce es la mejor opción para principiantes, dado su fácil curva de aprendizaje y la adaptabilidad de muchos peces a esas condiciones acuáticas.
Acuario de agua dulce y sus accesorios
Qué acuario elegir
Lo básico es comenzar con un acuario de agua fría en el que puedes introducir goldfish u otros que soporten esa temperatura del agua. Son fáciles de mantener, tanto a los peces como al propio acuario.
También se puede comenzar con un acuario de agua dulce para peces tropicales, es un poco más complicado, pues precisan un control de la temperatura y un mantenimiento más exhaustivo, aunque existen peces que soportan diferentes parámetros de agua, y por lo general no dan muchos problemas en cuanto su crianza.
Kit y precio de acuarios de iniciación
El precio de una acuario de agua dulce es variable, todo depende de la marca y tamaño, no es un hobby barato, aunque lo positivo es que son animales no trabajosos, por ejemplo, si tienes un perro, es necesario sacarlo a pasear, educarlo, cuidar que no moleste a terceras personas, etc. En acuariofilia es todo más práctico, sin molestias y menos trabajoso que una mascota tradicional. Si se dispone de espacio, un acuario mediano es una opción acertada. Los kits de acuarios pequeños, sin bien son económicos, con el tiempo quedan limitados en cuanto expectativas, puesto que se tiende a introducir más peces y accesorios, por lo que nuevamente será necesario en invertir en otro más grande.
La ubicación del acuario es importante
Una vez instalado el acuario de agua dulce es difícil moverlo de lugar, ya que entre el agua y todo los accesorios pesa demasiado. Por lo que antes de instalarlo es necesario pensar la ubicación más acertada: que esté cerca de una toma de corriente para poder operar con los elementos que incorpora (bomba, filtro, etc.); nunca colocarlo en un lugar con acceso directo al sol ni a radiadores; un lugar cálido es buena opción, es decir, sin demasiado frío ni calor; finalmente con suficiente espacio para que se pueda manipular sin dificultad.
Filtración
Un sistema de filtrado en acuarios debe cumplir sus funciones primordiales, concretamente limpieza del agua tanto a nivel mecánico como biológico. Desde el punto de vista mecánico, consiste en eliminar partículas de suciedad del agua; en sentido biológico, se trata de conseguir que el ecosistema no se deteriore con la presencia de sustancias nocivas, fruto de desechos de comida y excremento de peces. Si la toxicidad es elevada perjudica a los peces. Se puede eliminar en parte, mediante cambios parciales de agua y la utilización de añadidos al filtro, es decir, accesorios que crean bacterias beneficiosas para el acuario (filtro biológico). La flora acuática también beneficia en la medida que mantiene bajos ciertos niveles tóxicos. En la actualidad se prefiere los sofisticados filtros biológicos, ya que también actúan como filtro mecánico y, en cierta medida, oxigenan el agua.
Existen dispositivos que actúan como oxigenadores, son bombas generadoras de burbujas, las cuales han demostrado ser eficaces en peces que requieren mayor oxigenación.
Calentar el agua: termocalentadores
Los termocalentadores son eficaces para calentar el agua de aquellos peces que precisen temperaturas cálidas, nos referimos a los peces de acuario de agua dulce tropical. Los de tubo son los más demandados, tienen un termostato para que la temperatura sea siempre constante, que es esencial para que no fluctúe y perjudique a los organismo del ecosistema.
Control del fotoperiodo. La iluminación
En el mercado existen numerosas marcas y modelos relacionados con la iluminación, esta ha de ser acorde con la urna y las especies a introducir en la misma.
Lo ideal es que la iluminación tenga previsto un temporizador, de esa manera podrá encenderse y apagarse tal y como se tenga programada, la media oscila entre 8 a 10 horas. Con esas variables podemos recrear el día y la noche y los organismos acuático lo agradecerán. Los que son nocturnos, necesitarán de refugios y otros artilugios para que la luz del día no los afecte negativamente.
El fondo del acuario
Básicamente un acuario de agua dulce o agua fría debe contener en el fondo grava y suelo fertilizante para el caso de que también se pretenda insertar plantas, el tamaño de la grava puede ser variable en función de los hábitos del pez, lo ideal es que no sea cortante, ya que lastimaría especialmente a las especies que viven en el fondo del acuario. En total una media de 8 cm de sustrato es suficiente para recrear el ecosistema de la mayoría de peces.
El fondo se puede hacer por capas, primero la capa fertilizante, luego mezcla de grava y fertilizante y finalmente rematarlo nuevamente con grava. Todos estos productos se puede adquirir en tiendas de acuariofilia, recolectarlos del medio natural no es buena opción, ya que pueden contener parásitos y agentes contaminantes.
Los fertilizantes para las plantas es una cuestión un tanto controvertida en el mundo de la acuariofilia, muchos consideran que no deben utilizarse, al menos una vez madurado el acuario de agua dulce, de lo contrario puede afectar considerablemente a los parámetros del agua.
Accesorios contaminantes
Muchos accesorios ornamentales para acuarios pueden constituir un verdadero problema, sobre todo si se opta por fabricarlos artesanalmente o introducirlos una vez recolectados del medio natural. En muchas ocasiones pueden venir contaminados, con parásitos, etc., por lo que constituyen un riesgo que debe evitarse a toda costa.
Lo más acertado es adquirir estos productos en tiendas de acuariofilia, pues el fabricante ya ha previsto esta problemática y por supuesto estarán esterilizados y listos para su introducción en el acuario de agua dulce.
Una vez instalado el acuario
Una vez instalado y funcionando el acuario de agua dulce hay que prestar atención a los extremos que seguidamente reproducimos.
Introducción de peces en el acuario
El acuario, una vez instalado, debe estar funcionando un mínimo de dos a tres semanas, de esa manera pueden colonizar las bacterias beneficiosas para los peces, durante ese tiempo se puede introducir pequeñas cantidades de comida, abono y todo lo relacionado con acondicionadores del agua, todos estos productos son de fácil adquisición en tiendas de acuariofilia. La temperatura y parámetros del agua también tienen que estar controlados antes de introducir los peces en el acuario.
Existen acondicionadores que efectivamente ayudan durante el proceso de ciclado, incluso se utilizan para acortar el tiempo e introducir en cuestión de días a los peces, pero no es lo más recomendable.
Una vez que el acuario de agua dulce esté completamente madurado, es el momento de la introducción de los peces.
Importancia de las plantas
Las plantas naturales en acuario son importante dado su cometido de facilitar oxigeno a los peces, además de absorber sustancias nocivas para los mismos. En algunas ocasiones cobran también relevancia en la reproducción de los mismos.
Las artificiales adornan pero se alejan de la esencia de lo que es un ecosistema acuático natural.
Las plantas naturales se pueden clasificar en dos grupos: las flotantes que flotan en la superficie del acuario, aunque algunas especies se acoplan debajo justo de la superficie. Estas plantas son importantes para algunas especies de peces, especialmente aquellos que les molesta demasiado la luz. Son fáciles de mantener. La otra clasificación son las plantas que permanecen fijas en el sustrato, hay que extremar precaución para que la luz no quede limitada y afecte a su crecimiento, también con determinados tipos de peces tropicales, que pueden engullirlas o moverlas.
Alimentación
La alimentación es variada y se aconseja de fabricación industrial, en tiendas de animales se pueden encontrar multitud de productos. Entre la comida para peces de agua dulce y tropical destacan:
Los balanceados comerciales: como las hojuelas o tabletas.
Invertebrados vivos: Daphnia, camarones, Artemia, gusanos y larvas.
Alimentos congelados: nos sacan de apuros y son prácticos al poder facilitárselos sin un previo cultivo, existen varios especialmente crustáceos, larvas, artemias, etc.
Alimentos liofilizados: conservan la morfología de la presa, pero han pasado por un proceso de deshidratación, es un complemento, administrar solo este alimento puede aparejar déficit en el pez de acuario.
Comida especial para herbívoros: sin duda un elemento indispensable para el mantenimiento de peces herbívoros, suelen llevar componentes de algas y otras materias vegetales.
Comida en polvo: útil para los peces en su estado larvario.
Quistes de artemia: si queremos dedicarnos al cultivo de artemias, los huevos son resistentes a la desecación, por lo que con los parámetros adecuados se logra que se activen o eclosionen y así facilitárselo a los peces.
Restaría la alimentación para ciertas especies herbívoras, que precisarán de papillas caseras elaboradas con vegetales, incluso los propios vegetales fresco. Para los peces carnívoros de tamaño grande, trozos de pescados o crustáceos, incluso pequeños peces bien vivos o troceados.
En balanceados comerciales hay muchos surtidos, incluso plancton líquido que ayuda a la alimentación de alevines y determinados invertebrados.
Existe también comida gelatinada, son alimentos con presentaciones en gelatinas, muy prácticos en ausencias por periodos temporales en el que el acuario de agua dulce no se va a mantener, por ejemplo en vacaciones. Lo positivo es que pueden aguantar hasta dos semanas y según el fabricante tampoco alteran la composición química del agua.
Comportamiento y compatibilidad de especies
En acuario de agua dulce tropical, entre los más populares por el coste módico y su fácil mantenimiento son los guppys. El pez ancestral en sí no es como el que existe en acuariofilia, digamos que es más normalito. Fruto de la selección se han conseguidos machos con su gran diversidad de colas. No obstante, son muchas más las especies que se pueden mantener sin dificultad en acuarios de agua dulce, para no hacer demasiado extensivo este artículo, las trataremos de manera independiente en otra ocasión.
No hay que olvidar a las carpas coloreadas o doradas, especies en la que la mayoría de aficionados comienzan a dar sus primeros pasos en el acuario de agua dulce.
La compatibilidad es muy importante, pero no solo desde el punto de vista de introducir peces pacíficos, también influyen otros parámetros a tener en cuenta, como requerimientos de agua afines o el hecho de que presenten comportamientos de nado similares. Todo en conjunto redundará en su bienestar y podremos mantenerlos más longevos.
También se pueden introducir algunos peces del género Corydoras, que suelen limpiar un poco el acuario de agua dulce. Los come-algas, integrantes de la familia Loricarridae, igualmente ayudan frente a las plagas de algas. Generalmente son peces de utilidad en la medida que contribuyen positivamente al recreamiento del ecosistema del acuario.
Reproducción
Muchas personas se preguntan si es difícil la reproducción de peces de acuario de agua dulce, lo cierto que es un tema complicado de responder, dado la gran cantidad de especies existentes, algunas sí pueden reproducirse con suma facilidad, otras en cambio requieren parámetros especiales en el agua, por ejemplo incremento de la temperatura o pH; finalmente están aquellos que prácticamente no se reproducen, o los que de poder hacerlo no se han reportado datos dado su complejidad.
Otras consideraciones
Enfermedades y salud
Enfermedades en peces ornamentales puede deberse tanto a factores bióticos como abióticos. Los abióticos son los relacionados con elementos no vivos, se asocian a problemas con el agua, principalmente por ausencia de parámetros adecuados: luz, pH, oxigenación etc. Los factores bióticos hace referencia al componente vivo del acuario, como los propios peces, vegetales, etc. Algunos de estos componentes son seres vivos perjudiciales y causan graves problemas al aficionado, por ejemplo las plagas de algas, parásitos, etc. Tener un control de estos dos factores es importante para lograr un óptimo equilibrio que repercutirá en la buena salud de los peces.
Las condiciones no adecuadas en el agua del acuario de agua dulce son las principales causa de muerte de los peces, siempre es necesario investigar cuando se tenga alguna baja, de esta manera se puede prevenir que no afecte a los demás habitantes de la comunidad acuática.
Los test para comprobar la calidad del agua y asegurar que cumple con los parámetros adecuado, es la mejor opción en cuanto a medidas de precaución.
La alimentación debe adaptarse a la especie de pez en cuestión, ha de ser de calidad, de lo contrario las carencias en alguno de sus componentes dan lugar a futuras enfermedades.
Una pequeña urna, a modo de acuario hospital, es muy útil para peces que tengan que pasar un periodo de cuarentena, también para aquellos que por alguna razón consideremos que es necesario aislarlo si sospechamos de alguna patología.
La compra de peces
Para la compra de peces es mejor realizarla de manera personal, así se puede revisar su coloración, respiración, el estado de sus ojos, si el pez goza de actividad, si come con normalidad y el hábitat en el que ha vivido antes de su compra.
Parámetros del agua y mantenimiento
Un acuario de agua dulce es un ecosistema de dimensiones reducidas por lo que es susceptible a concentraciones elevadas de compuestos nitrogenados (bien mediante heces, orina, restos de comida, etc.), mantenerlo lo más bajo posible es fundamental para evitar toxicidad. Por esa razón es importante suministrar la comida sin exceso, una buena filtración y oxigenación, higiene adecuada y cambios periódicos del agua.
Los cambios de agua del acuario deben ser parciales, lo ordinario o aconsejable según expertos es 1/3 parte cada 2 o 3 semanas. También hay que controlar la calidad, eso se consigue con los test indicadores de los parámetros del agua.
Cantidad de agua que necesita un pez
El número elevado de peces es muy perjudicial y da lugar a que el agua se ensucie, además son propensos a contraer enfermedades. Para hacernos una idea, un pez de aproximadamente un centímetro va a necesitar dos litros de agua, de esa manera podrá vivir sin dificultad. Con ese parámetro se puede calcular los peces a introducir en el acuario de agua dulce, un criterio que atiende a su capacidad.
Hay que tener en cuenta el espacio, es decir, que la urna sea holgada y que los peces puedan realizar nados sin dificultad.
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