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Los Moluscos forman uno de los filos de animales más numerosos y variado, incluyen animales tan dispares como los caracoles, los pulpos o las almejas, por mencionar algunos ejemplos. Son animales invertebrados y según la clasificación taxonómica tienen simetría bilateral, no obstante, a nivel secundario, los hay también asimétricos, son celomados, triblásticos y protóstomos.
Constituyen el filo con mayor número de animales marinos, suponen el 23% del total de los animales de mar. Sin embargo, también habitan en otros lugares tales como el agua dulce o la tierra. Son muy diversos tanto en anatomía como en estructura y comportamiento.
Se calcula que aproximadamente un cuarto de las especies totales de moluscos que han habitado alguna vez la Tierra están extintas. De hecho, se conoce que llevan en la tierra más de 500 millones de años. Se han encontrado multitud de fósiles del grupo Mollusca y han resultado muy útiles para la datación de rocas y la delimitación de biozonas. Algunos de estos fósiles son nautilos, un suborden que todavía hoy sobrevive.
Ciertos moluscos se han adaptado a ambientes extremos, de hecho los hay que viven en los polos, otros en altitudes que superan los 4000 m. En el agua también se han descrito en rangos que superan los los 3000 m.
Características de los moluscos
Estos invertebrados tienen tres características principales que los hacen diferentes de otros filos de animales: la presencia de una estructura conocida como manto, un órgano llamado rádula y la estructura de su sistema nervioso. Otras características de los moluscos también se detallan a continuación.
El manto: es la pared dorsal que cubre la masa visceral del animal. En muchas especies, la epidermis de este manto secreta carbonato de calcio y forma una concha, en determinados casos, a modo de exoesqueleto. Esta reviste infinidad de coloraciones, además, en muchas especies, la parte interna se recubre por un material tipo nácar o semejante a la porcelana. Existen determinados individuos en que la concha está ausente, y es el manto (con sus características especiales) el que puede asumir la función de exoesqueleto.
La rádula: es el órgano que los moluscos utilizan para su alimentación y tiene una morfología similar a una lengua, aunque su función es mucho más compleja. La rádula está llena de dientes pequeños y se utiliza para rasgar o cortar la comida antes de que entre en el esófago del animal. En algunas especies la rádula está más especializada y es capaz de atravesar conchas de otros animales o de inyectar veneno a sus presas.
El pie: es una estructura también muy importante, aunque se ha adaptado de manera diferente en función de las clases de moluscos. Se caracteriza por tener una musculatura realmente potente y compleja. El uso más extendido de este órgano es el de la locomoción, tal como pasa con los gasterópodos. Sin embargo, en los bivalvos sirve para excavar o en los cefalópodos ayuda a proporcionar propulsión.
Tubo digestivo: el tubo digestivo es completo y éste comienza en la cavidad bucal, con la rádula como órgano más importante. La rádula dispone de músculos que le permiten proyectarse fuera de la propia cavidad bucal. Después encontramos un esófago y un estómago relativamente complejo que desemboca en un intestino enrollado y finaliza en el ano.
La respiración: es branquial en los marinos y pulmonar o cutánea en los moluscos terrestres. En el caso de los marinos, la mayoría de ellos poseen solamente un par de branquias o una sola y son externas. Los que tienen respiración pulmonar presentan un solo pulmón con una apertura. Otros han perdido totalmente este pulmón y respiran a través de su piel.
Sistema nervioso: destaca por su estructura característica. La mayoría presenta un par de cordones neurales, mientras que los bivalvos presentan tres. Estos se distribuyen para llegar tanto a los órganos internos como al pie. Los cordones neurales incluyen ganglios que actúan como centros de control de las diferentes partes del cuerpo. Los ganglios más importantes se suelen encontrar alrededor del esófago y forman el cerebro. La mayoría de moluscos tienen ojos y varios sensores para detectar vibraciones y cambios químicos.
Otra de las características del filo Mollusca es que varios de sus órganos participan en otras funciones que a priori no serían atribuidas a ellos. Por ejemplo, su corazón o sus nefridios tienen un papel importante en la reproducción. En algunos casos sus branquias necesarias para respirar, también están involucradas en la excreción o la reproducción.
Los moluscos presentan unos sistemas relacionados con la nutrición bastante más complejos que la mayoría de invertebrados inferiores. Destaca especialmente el cerebro de los cefalópodos, que es el más complejo de todos los animales invertebrados.
Características comunes
Existen tres características comunes en los moluscos, así tenemos que el cuerpo está dividido característicamente en tres zonas corporales: la región cefálica, el pie y la masa visceral. Además, todos se caracterizan por poseer un cuerpo blando. En estos animales la pared dorsal del cuerpo se pliega y se extiende a los lados del cuerpo para constituir el palio o manto. El espacio que queda entre el manto y el cuerpo se denomina cavidad paleal.
En los moluscos con concha, el manto que se divide en varias capas, se encarga de segregar espículas y la concha. El tubo digestivo consta de una boca cuya cavidad presenta un órgano raspador con alto valor taxonómico llamado rádula. La rádula posee hileras de dientes que van desde uno pocos hasta más de 250 mil y está sostenida por un odontóforo cartilaginoso. Sigue el esófago y el estómago con glándulas hepáticas, el intestino, el recto y un ano que desemboca en la cavidad paleal.
Respiran a través de la cavidad del cuerpo y el manto o mediante órganos respiratorios como las branquias o los pulmones, en el caso de los terrestres. El sistema circulatorio es abierto, con la excepción de los pulpos y calamares, los cuales poseen un sistema circulatorio cerrado. Tienen un corazón tricameral, rodeado de una cavidad pericárdica y zonas muy vascularizadas.
Por otro lado, el aparato excretor esta formado por metanefridios que desembocan en la cavidad paleal. También cuentan con una gran variedad de órganos sensoriales. En cuanto a la reproducción puede ocurrir de manera interna o externa. En los moluscos primitivos se desarrolla la larva trocófora que se convierte en un juvenil por metamorfosis. En los más evolucionados ocurre la larva veliger, mientras que otros grupos tienen desarrollo directo.
Biología reproductiva
La biología reproductiva de los moluscos es solamente sexual, aunque los sistemas para ello pueden variar entre especies. Por ejemplo, los bivalvos son unisexuados mientras que los gasterópodos son hermafroditas, incluyendo algunos que pueden autofecundarse.
En la mayoría de los casos, los que son unisexuados tienen una fecundación externa mientras que los hermafroditas tienen fecundación interna. En la mayoría, el desarrollo embrionario es indirecto, ya que deben pasar por una fase larvaria antes de convertirse en adultos.
Tipos de moluscos
Aunque se conocen diez clases de moluscos, incluyendo actuales y extinguidos, son tres las clases más importantes. Estas son los gasterópodos, los cefalópodos y los bivalvos.
Gasterópodos: Los gasterópodos serían todos los caracoles y babosas y suponen el 80% de especies de moluscos.
Cefalópodos: En los cefalópodos se incluyen a los pulpos, calamares y sepias y resultan el grupo menos numeroso, aunque más evolucionado en muchos aspectos.
Bivalvos: Por último, en los bivalvos se incluyen almejas, mejillones, ostras y se caracterizan por ser los únicos moluscos sin rádula.
Otros tipos de moluscos
Aplacóforos: Organismos con forma cilíndrica, carecen de concha y pie, son animales primitivos sin cabeza diferenciada. Hoy en día se considera un grupo parafilético.
Poliplacóforos: Destaca la estructura muscular a nivel ventral (pie) de los poliplacóforos, el dorso presenta placas de tipo calcáreas, están articuladas, por lo que habilita al molusco a enrollarse por sí mismo, dándole forma esferoidal.
Monoplacóforos: moluscos de simetría bilateral y con presencia de concha, pero formada de una sola pieza, el borde de la misma es un tanto circular y aumenta en estratos concéntricos. Los monoplacóforos son de sexo separados.
Caudofoveados: organismos tipo vermiforme y forma cilíndrica, no disponen de concha ni de ojos, su cuerpo se recubre de cutículas y espículas calcáreas. Están muy extendidos geográficamente, viven en el sustrato marino y se entierran adoptando una posición vertical. Al igual que el caso anterior, los caudofoveados son de sexos separados.
Solenogastros: presentan forma alargada, tipo cilindro y son vermiformes. Carecen de concha, aunque sí presentan espículas calcáreas. Se trata de invertebrados pequeños, miden de media 1 cm de longitud. No poseen ojos, ni tentáculos, ni otros órganos presentes en el grupo Mollusca, por lo que los solenogastros son bastante primitivos.
Escafópodos: se caracterizan por la presencia de una concha un tanto curvada, pero con los extremos abiertos. Su cuerpo es largo y en forma tubular, carecen de ojos y ctenidios, no obstante, presentan rádula y tentáculos. Habitan en áreas con fango, introducen la cabeza en el mismo, dejando expuesta la parte más estrecha de la concha. Los escafópodos se pueden avistar en casi todo los mares.
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