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Las bacterias son un grupo de microorganismos (más información) de gran diversidad, desde su descubrimiento han fascinado tanto a científicos como a la población en general. Estos seres vivos pueden resultar patógenos para los humanos o, por el contrario, pueden ofrecer ciertos beneficios dependiendo de la especie. La bacteria Escherichia coli (E. coli) es una de las más estudiadas, ya que representa un modelo importante para diversos estudios.
En la actualidad, existen diversos serotipos de esta bacteria, confiriéndole cualidades específicas a cada una de ellas. En nuestro artículo abordaremos de forma general las principales características que distinguen a E. coli de otras enterobacterias, conoceremos cuál es su hábitat y las posibles complicaciones que pueden generar.
¿Qué es Escherichia coli?
E. coli es un tipo de bacteria muy común que pertenece al grupo de las Gramnegativas, poseen movilidad gracias a los flagelos peritricos que presentan y son capaces de colonizar en muchos ambientes por su baja exigencia nutricional. Debido a su forma de bastoncillo, también se le da el nombre de bacilo coli.
Actualmente, se conocen más de 200 serotipos, siendo patógenos para el ser humano solo alguno de ellos. Esta bacteria fue descubierta en 1885 por el médico pediatra alemán Escherich, quien la denominó bacteria común del colon (Bacterium coli commune) y para el año 1919 se le otorga el nombre de Escherichia en honor a su descubridor.
Taxonomía
Es bien conocido que E. coli es una bacteria que pertenece al grupo de las enterobacterias, y su clasificación completa es la siguiente:
- Reino: Bacteria
- Filo: Proteobacteria
- Clase: Gammaproteobacteria
- Orden: Enterobacteriales
- Familia: Enterobacteriaceae
- Género: Escherichia
Hábitat de Escherichia coli
Tal como su nombre la describe, el hábitat natural de esta enterobacteria es el colon, tanto de mamíferos como de aves, sitio donde se reproduce y es capaz de realizar los procesos fisiológicos rápidamente. Debido a esto, la presencia en otros ambientes, como el agua, es un indicio de la contaminación fecal.
Sin embargo, el estudio de la ecología bacteriana ha logrado establecer que E. coli es capaz de sobrevivir y reproducirse en otros tipos de ambientes que no corresponden al tracto digestivo. Tal es el caso de cepas que logran colonizar en la sangre y en el tracto urinario. De igual manera, hay cepas de vida libre, quienes han sido encontradas en los suelos y aguas.
Características de E. coli
Forma y tamaño: tiene forma de barra o bastoncillo, razón por la que se denominan bacilo. En cuanto al tamaño es de aproximadamente 3 micras de largo y 0,5 de ancho.
Gram negativa: como el resto de las enterobacterias, se caracteriza porque durante el proceso de tinción química se tiñe de un color rosa claro. Esto se fundamenta en que la pared de peptidoglicano es delgada y no logra retener el colorante cristal violeta empleado durante el proceso.
Anaerobio facultativo: de forma natural, E. coli prefiere vivir en un ambiente con ausencia de oxígeno, pero también tiene la faculta de sobrevivir y obtener energía en sistemas aerobios.
Temperatura de crecimiento: el mayor nivel de crecimiento lo alcanza a temperatura de 35 a 43 °C (es mesófila), por lo que se han adaptado de manera extraordinaria a sus hospedadores que son los animales homeotermos. Las bajas temperaturas inferiores a 7 °C reducen el crecimiento, más no las elimina, para poder eliminarlas deben ser sometidas a 70 °C.
Motilidad y formación esporas: esta bacteria posee la capacidad de moverse gracias a la presencia de flagelos peritricos y no son formadores de esporas.
Características bioquímicas: es una bacteria que fermenta la glucosa y la lactosa con producción de gas. Es indol positiva, ya que puede generarlo a partir del triptófano, no utiliza citrato y no genera acertoina.
Importancia en el cuerpo humano
A pesar de que existe el temor por las cepas patógenas, la mayoría de las E. coli cumplen una función vital en los seres humanos. Ayuda en los procesos digestivos, de manera que degradan los alimentos para que los nutrientes puedan ser absorbidos con mayor facilidad.
Así mismo contribuyen con la fabricación de vitamina B y la vitamina K, vitaminas implicadas en los procesos de coagulación de la sangre. Este microorganismo es uno de los más utilizados en biotecnología, a través de la manipulación genética se ha modificado su genoma de forma que se convierten en una minifábrica de ciertas proteínas que se utilizan en la medicina, entre ellas podemos mencionar la insulina.
Cepas patógenas de E. coli
Tal como se ha mencionado, algunas cepas de estas bacterias pueden resultar patógenas y mortales para el ser humano. A través del estudio de su componente antigénico, se han logrado clasificar y tipificar varias de ellas, de las cuales están las siguientes:
E. coli enteropatógena (EPEC): es un tipo de bacteria que causa problemas de forma común en niños con menos de 2 años de edad. La infección con este serotipo se caracteriza por atacar la microvellosidades del enterocito, provocando una lesión que se conoce como A/E (adherencia y esfacelamiento). Durante la diarrea se produce la salida masiva de iones.
E. coli enteroinvasiva (EIEC): por su capacidad invasiva y daño a las células del colon, tienen como efecto la aparición de episodios de diarrea acuosa y en ocasiones sanguinolentas. No producen toxinas.
E. coli enterohemorrágica (EHEC): es un tipo de bacteria capaz de producir infecciones graves. Son productoras de citotoxinas SLT (shiga-like-toxins) las cuales pueden inducir el síndrome urémico-hemolítico y diarreas sanguinolentas. Un ejemplo muy conocido es la cepa O157:H7.
E. coli enterotoxigénica (ETEC): es un serotipo que se caracteriza por provocar diarreas profusas, sobre todo en población infantil menor a 5 años. También es productora de toxinas termolábil (LT) y termoestable (ST). Junto con la E. coli enteroagregativa conforman las variantes que producen la diarrea del viajero en personas adultas.
Referencias
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