Animales que abandonan a sus crías

La conducta de los animales es parte de la especificidad de cada especie, lo que los hace únicos y diferentes entre ellos. Algunos de estos comportamientos, como el de los animales que abandonan a sus crías, parecen carecer de sentido e incluso crueles si lo comparamos con otros animales o los propios humanos, pero, en realidad, pertenece a un complejo proceso evolutivo.

En cada grupo taxonómico se han observado especies que dejan solas a las crías recién nacidas, y todo ello forma parte de la naturaleza y de los instintos de supervivencia de cada uno de ellos. En este artículo abordaremos todo lo referente a las especies animales que abandonan a sus crías, citando ejemplos específicos para mayor comprensión.

¿Por qué los animales abandonan a sus crías?

En el reino animal las reglas para la supervivencia suelen cambiar entre las especies, por lo tanto, deben buscar los mecanismos de adaptación para lograr una vida lo más placentera posible. En el caso de los animales que abandonan a sus crías, se debe a funciones adaptativas que contemplan en mantener con vida a la progenie y la de sus padres.

Aunque parezca contradictorio, el que estos individuos abandonen a sus crías tienen una razón de ser y no siempre es porque sean malos padres y no quieran hacerse cargo de sus pequeños. Es importante mencionar que en muchas especies las crías ni siquiera conocen a sus padres, por lo tanto, deben arreglárselas por si solos en la naturaleza.

¿Cuáles son los animales que abandonan a sus crías?

Como ya se mencionó, existen muchas especies de animales que abandonan a sus crías, entre ellos varios reptiles, mamíferos, peces, aves e insectos.

Serpientes: consideradas una de las madres más crueles, las serpientes no son para nada amigables con sus crías. Estos reptiles, tanto las vivíparas como las ovovivíparas, no tienen ningún cuidado sobre sus pequeñas, una vez que nacen o eclosionan de los huevos las serpientes bebes deben enfrentarse a la vida de inmediato.

A pesar de ser pequeñas, tienen todo lo necesario para sobrevivir, pero como siempre hay excepciones a la regla, como en el caso de las boas, que siempre están pendientes de sus huevos.

Tortugas marinas: estas adorables criaturas también carecen de cuidado parental, a pesar del gran esfuerzo migratorio para llegar a las playas donde desovarán, las tortugas marinas entierran a los huevos en tierra firme y se devuelven al mar.

 En este caso las tortugas no pueden permanecer junto a sus huevos porque son presa fácil en tierra, por lo tanto, cuando los huevos eclosionan y las crías salen de la arena deben emprender su viaje en solitario al mar, muchas de estas tortugas son víctimas de los depredadores locales.

Osos panda: este es un caso especial, este tierno animal tiene un ciclo de vida bastante complicado; además, su dieta selectiva hace que sea difícil cuidar de sus oseznos. Normalmente, este oso puede tener dos o más crías, pero en realidad cuidará de uno solo, el otro no recibirá ningún tipo de atención, esto se debe a que todo su esfuerzo y energía será puesto para que uno tenga todas las condiciones para poder sobrevivir.

Conejos: en el caso de los conejos no se puede hablar de un abandono completo de sus gazapos, estos preciosos animales utilizan una técnica de supervivencia cuando se encuentran libres en la naturaleza. Esta consta de tener el menor contacto posible con sus crías, una vez que nacen y los amamanta, la madre sale y los deja encerrados bajo tierra en su nido y solo los visita una o máximo dos veces por día durante algunos minutos, tiempo necesario para amamantarlos y dejarlos encerrados nuevamente. Esta acción evita que los depredadores puedan rastrear su olor y la encuentre junto a sus pequeños.

Ave cuco: un gran porcentaje de aves forman sus propios nidos y son unos excelentes padres, defienden la nidada con todo lo que tienen y contra cualquier intruso, pero en el caso del cuco la realidad es otra.

Esta es un ave parásita, es decir, prefiere que otra madre críe a sus polluelos. Lo que hace este pájaro es ir colocando un huevo en nidos de otras especies, práctica que resulta peligrosa y con un alto índice de mortalidad, ya que cuando la otra pareja se da cuenta puede romper el huevo o elimina al recién nacido. Claro está que cuando tienen éxito, el cucú recién nacido elimina la competencia rompiendo los huevos de la otra especie, o si ya han nacido, los puede hacer caer del nido.

Los talégalos​: también conocidos con el nombre de megápodos, son unas aves de tamaño medio a grande, propias de Australia, Filipinas e Indonesia. Estas aves, a pesar de que hacen nidos realmente grandes, no tienen contacto directo con los huevos, solo se limitan a mantener controlada la temperatura con aumento o disminución de la vegetación.  Una vez que han eclosionado los huevos, las pequeñas aves salen del nido por sus propios medios y no se involucran con sus padres.

Mariposas: como muchos insectos, las mariposas no tienen un cuidado parental, entre ellas están las mariposas monarcas. Este insecto simplemente pone un huevo en una hoja y se aleja, una vez que eclosiona sale una larva que pasara por distintos estadios hasta convertirse en una mariposa adulta, todo este proceso lo vive en solitario.

Referencias

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